Francisco Cornely: línea arqueológica de la Cultura Diaguita

Descargar ficha en formato PDF

Francisco Cornely: línea arqueológica de la Cultura Diaguita

Diversas excavaciones realizadas en cementerios situados en especial en el Valle de Elqui permitieron al arqueólogo Francisco Cornely plasmar la primera secuencia de la evolución cultural del pueblo diaguita a través del estudio de su cerámica.

En Cultura diaguita chilena y cultura el molle (1956), y Arte decorativo pre-incaico de los indios de Coquimbo y Atacama (1962), Cornely reconoció tres etapas en el desarrollo y evolución de este pueblo a partir de la tipología cerámica:

Arcaica: Se caracteriza por el material cerámico obtenido en el sitio arqueológico Las Ánimas, ubicado en el Valle del Elqui. Sus rasgos más relevantes son las formas subglobulares y troncocónicas, decoradas con motivos geométricos simples en el interior de la pieza, en tres colores básicos: rojo, negro y blanco.

Transición: la decoración y las formas de la cerámica en esta fase cambian por las influencias "Chichas" de la costa peruana, postuladas anteriormente por Latcham. Éstas se caracterizan por una gran riqueza de diseños geométricos en la decoración.

Los hallazgos de esta fase se han registrado entre Copiapó hasta el Valle del Choapa, enriqueciéndose con el uso de anzuelos de cobre, espátulas de hueso, torteros, pinzas, aros, herramientas de cobre y puntas de flecha (Ampuero, 1978: 24).

Clásica: Se define por un cambio en la forma y decoración de la cerámica. Los platos eran de mejor factura, con paredes rectas y bases redondeadas, algunos con representaciones zoomorfas, que ya se conocían en menor escala en la etapa anterior.

La metalurgia logró un mayor desarrollo. Se introdujo el uso de lajas de piedra o trozos de depósitos de conchas fosilizadas en las tumbas. Las sepulturas se enmarcaban con su correspondiente tapa y guardaban los restos de uno o más individuos, con sus objetos de ajuar, especialmente cerámica, collares, metales, entre otros.